ROL 3.0
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Historia: Quinta Parte. "La Era de Plata"

Ir abajo

Historia: Quinta Parte. "La Era de Plata" Empty Historia: Quinta Parte. "La Era de Plata"

Mensaje por Admin Mar Mar 08, 2016 11:25 pm

Al terminar al fin el asedio de los Drows y darse por finalizada la Guerra Lupina, Utyrion comienza a vivir uno de los periodos más largos y prósperos en toda su historia. El gran aumento de la población y el número de razas ha servido para que se consigan habitar prácticamente todas las regiones del mundo, y debido al gran número de personas, los grandes nobles decidieron que, a partir del final de la guerra, se comenzarían a organizar en cada región por ciudades.

Las primeras ciudades en nacer son las de los Altos Elfos en Theonanar, Indaia e Indand, por lo que la primera capital desde donde se rige prácticamente todo el mundo pasa a ser Eknar. Con el paso del tiempo, van naciendo más y más ciudades por todo el mundo y las razas se van expandiendo cada vez más.

Los Medianos conquistan las regiones de Anul Este y Oeste, así como la del sur Asor. Durante estas conquistas, los Fortecores comenzaron, como todo el mundo, a crear sus propias ciudades. Sin embargo, con el paso de los años, los Fortecores más vagos se veían muy agobiados en las ciudades y decidieron abandonarlas e ir a vivir en bosques y valles, creando una nueva sociedad: los Hobbits. Además, la parte más pobre de los Fortecores que se mantuvo en las ciudades comenzó a sentir graves necesidades de subsistencia, y para no tener que abandonar la ciudad, decidieron migrar a las zonas más pobres, abandonando la alta alcurnia y comenzando a robar y cometer delitos para subsistir, naciendo así los Halflings. Por último, una vez ya consolidadas las ciudades, algunos de los nobles ansiaban más poder y su ego estaba cada vez más henchido, por lo que decidieron iniciar una guerra interna para eliminar al resto de Fortecores y hacerse ellos con el poder. Sin embargo, fueron derrotados y, después, exiliados de las ciudades. Ahora, viven en cuevas y montañas, en poblados nómadas, y han pasado a denominarse Fantasagaces.

Los Enanos de Montaña se expanden por el sur y conquistan la región de Agacir, en Theonasya. Las Hadas también expanden su territorio y se quedan con el territorio de Indum. Los Humanos, ansiosos de poseer un territorio propio en el próspero continente de Theonasya, conquistan los territorios de Egannir y Casanion. Durante estas conquistas, hubo parte de los humanos que decidieron revelarse y trataron de quedarse ellos con el poder. Sin embargo, terminaron siendo desterrados y pasaron a vivir en zonas recónditas del mundo, denominándose a sí mismos los Desterrados. Otra parte de los humanos, sobre todo de los ejércitos, decidió no vivir en las ciudades puesto que odiaban ese tipo de organización política, y se separaron de sus congéneres para habitar, de forma nómada, en poblados, naciendo así los Bárbaros. Los humanos no nobles que decidieron quedarse en las ciudades fueron, con el tiempo, ganándose el nombre de Ciudadanos.

Por otra parte, los Orcos de Montaña trataron de conquistar más zonas. Mandaron una expedición en barco y llegaron al territorio en Theonasya de Thibius. Una sección de los orcos fue desterrada de su pueblo por revelarse contra los nobles. Pasaron a vivir en cuevas para preparar su venganza y recuperar su lugar en las montañas, y se autodenominaron Orogs. Los Orcos Nómadas, sin embargo, son aquellos que decidieron abandonar las montañas y expandir sus mentes y su cultura por el resto del mundo. Se habituaron perfectamente a la vida con otras razas y dejaron de ser temidos.

Los Drows, con el tiempo, cuando se recuperaron de la guerra, comenzaron a expandirse poco a poco, quedándose con los territorios de Tesinon, en Ibitrion, y Prosn, en Myranaia. Los Licántropos, a su vez, decidieron expandirse y conquistaron los territorios en Myranaia de Ícide, Morton y Kern. Los Albóclopos, nobles licántropos, y los Antríclopos, los de aspecto más humano, son los que se quedaron a habitar en las ciudades. En cambio, los Fogólopos, de aspecto más lupino, fueron desterrados por tratar de iniciar otro conflicto bélico contra los Drows, y habitan en territorios alejados del resto de sus congéneres, en cuevas y montañas. Los Astelópodos tienen también mayor aspecto lupino. Sin embargo, son pequeñas secciones de los licántropos que decidieron migrar de las ciudades y vivir en pequeños poblados nómadas por todo el mundo.

Los Elfos no expandieron sus territorios porque se centraron en prosperar lo mejor posible. Sin embargo, parte de estos no estaban contentos con la forma de prosperar de sus hermanos, los cuales se dedicaban a talar árboles y utilizar la naturaleza destruyéndola para su propio uso y disfrute. Por tanto, se separaron de los elfos y pasaron a vivir en los bosques, en concordia con la naturaleza, pasando a denominarse Elfos de los Bosques.

La única región que se quedó prácticamente vacía fue Arcaia. Varias razas fueron poblándola poco a poco pero ninguna se quedó completamente con ella. Los más altos líderes de cada una de las razas querían conquistar todo el territorio para ellos. Sin embargo, fueron los Elfos los primeros en llegar allí, a pesar de su lejanía, y los primeros en crear una gran ciudad, la cual llamaron Lezara. El resto de razas, no contentas con esta decisión, trataron de iniciar un conflicto contra los elfos para destruir dicha ciudad. Sin embargo, fueron incapaces de organizarse, pues en ese territorio abundaba el caos. Había pequeños conflictos y pequeñas batallas por todo el territorio que tan sólo lo iban destrozando poco a poco. Los elfos, por tanto, al darse cuenta de las riquezas tanto naturales como místicas que poseía dicho territorio, tuvieron una gran idea.
Antes de que las batallas acabaran de destruir aquella región, iniciaron el Concilio de Razas, una reunión con los líderes de cada una de las razas para decidir cómo se haría el reparto de aquella zona. Sin embargo, fue imposible delimitar las fronteras para cada una de las razas, puesto que todas querían poder disponer de todos los recursos que allí se encontraban. Por tanto, había que encontrar otra solución.

Los Elfos ya disponían de una ciudad allí. Entonces, propusieron al resto de razas que, cada una de ellas, formara su propia ciudad allí, pero que el territorio perteneciera a todos a la vez, o más bien, que el territorio pasara a ser un territorio neutral con la presencia de todas las razas allí, y que los conflictos bélicos nunca pudieran tener lugar en dicho territorio. El resto de razas aceptó dicho trato. Entonces, se hizo un reparto de territorios, de tal forma que se crearon ocho ciudades más alrededor de la que ya habían empezado a crear los elfos: Liugem para los Enanos, Iurel para los Humanos, Hulejide para los Licántropos, Abraqueil para las Hadas, Azzale para los Drows, Brigela para los Orcos, Afrale para los Medianos y Leletias para los Draconianos, o más bien para los Emberi, puesto que los Nerodraconis y los Alfa no se movieron de sus territorios iniciales.

Aquel reparto de territorios durante el Concilio de Razas sirvió para, con el tiempo, crear el centro de decisiones políticas de todo el mundo. La unión de las nueve ciudades pasó a denominarse como Novem Civitas, y allí se decidía todo aquello relacionado con temas políticos. Con el tiempo, en desde Novem Civitas se cerraron todos los acuerdos que permitían la creación de escuelas donde se enseñara la magia, y que en cada región habría una de estas escuelas, llamadas las Universidades Mágicas. También allí se estableció que cada una de las facciones de la magia podría poseer su propia Torre de Magia en la que poder estudiar más a fondo sus poderes, siempre y cuando estuvieran todas bajo la vigilancia y las órdenes de la ya creada Torre de Tendtan, creada antaño por los Elfos en Indand. Con esto se crearon varias torres de magia por el mundo: la Torre de Fuego, en Itingash, capital de Saronum; la Torre de Agua, en Karkot, la capital de Karkot; la Torre de Viento, en Onnineommor, capital de Escene en lo alto de una montaña; la Torre de Tierra, en Belom, capital de Urevova; la Torre Blanca, en Lezara, la ciudad de los elfos perteneciente a Novem Civitas y la Torre Neutral, en Eagea, capital de Bythacia. La Torre de los Drows, que estaba en Anradirkele, capital de Tevas, pasa a denominarse Torre Negra y a formar parte de esta conjunto de Torres Mágicas, regidas todas desde la Torre central en Tendtan.

Con el paso del tiempo, todas las ciudades se van consolidando, se van creando en el mundo nuevas ciudades, y las razas se van extendiendo, creando una gran variedad de habitantes en todo el mundo. Pasan más de cuatrocientos años para que todas las ciudades y territorios se consoliden del todo y se forme el mapa que hoy conocemos en Utyrion.
Admin
Admin
Admin

Mensajes : 167
Puntos : 452
Fecha de inscripción : 08/03/2016
Edad : 31
Localización : Medellín

https://fororol.forosactivos.net

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.